Guía aôra

Mantener una mente despejada y un cuerpo saludable es fundamental para el bienestar general y para que el tratamiento aôra sea funcional, preciso y consistente.

Aquí tienes algunas recomendaciones que combinan hábitos para la salud mental y física:

1. Practica la respiración profunda

• Dedica 5-10 minutos al día a respirar profundamente y enfocarte en el presente.
• Puedes usar aplicaciones o guías en línea para aprender técnicas simples.

2. Haz ejercicio regularmente

• Actividades como caminar, nadar o bailar ayudan a liberar endorfinas y reducir el estrés.
• Incluso 20-30 minutos diarios de movimiento pueden marcar la diferencia.
• Sal a caminar en un parque, bosque o playa. El contacto con la naturaleza y el sol mejora el estado de ánimo y reduce la ansiedad.

3. Establece límites digitales

• Reduce el tiempo frente a pantallas, especialmente en redes sociales.
• Dedica momentos específicos del día para desconectarte y hacer actividades sin tecnología.

4. Cuida tus hábitos de sueño

• Reduce el uso de dispositivos electrónicos al menos una hora antes de acostarte. La luz azul de las pantallas puede interferir con la producción de melatonina.
• En la medida de lo posible, ve a dormir y despiértate a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Esto ayuda a regular tu reloj interno.
• Mantén la habitación oscura, fresca y bien ventilada. Es muy importante el colchón y la almohada adecuada para ti.
• Reduce el consumo de cafeína, nicotina y alcohol, especialmente en la tarde. El alcohol puede hacerte sentir somnoliento, pero interfiere con el sueño profundo.
• Lee un libro, medita o escucha música tranquila.
• Si necesitas dormir durante el día, que sea una siesta corta (20-30 minutos) y no muy tarde.
• Evita comidas pesadas o picantes antes de dormir.
• Consume una cena ligera unas 2-3 horas antes de acostarte.

5. Realiza pasatiempos que liberen tu mente

• Dedica tiempo a actividades creativas, como pintar, escribir, cocinar o tocar un instrumento.
• Date tiempo para conversar sobre temas que te interesan y realizar actividades al aire libre.

6. Habla con alguien

• Comparte tus pensamientos y emociones con amistades, familiares o profesionales del acompañamiento emocional. Mantener conexiones sociales y vínculos estrechos, fortalece la salud mental.
• Reconocer los aspectos buenos de tu vida puede mejorar tu perspectiva y estado emocional.

7. Establece una rutina diaria y organiza tu espacio

• Tener horarios para trabajar, descansar y disfrutar reduce el estrés y mejora la productividad.
• Incluye pausas cortas durante el día para respirar y recargar energías.
• Un entorno ordenado favorece una mente despejada. Dedica tiempo a limpiar o reorganizar tu casa o lugar de trabajo.

8. Mantén una alimentación equilibrada

⋄ Prioriza los alimentos naturales y frescos

• Frutas y verduras: Consume al menos 4 porciones al día, de diferentes colores para obtener una variedad de nutrientes.
• Cereales integrales: Opta por arroz integral, avena, pan integral o quinoa en lugar de productos refinados.
• Proteínas magras: Incluye pollo, pescado, huevos, legumbres y productos lácteos bajos en grasa.
• Grasas saludables: Usa aceite de oliva, aguacate, frutos secos y semillas, limitando grasas saturadas y trans.

⋄ Controla las porciones

• Usa platos más pequeños para evitar comer en exceso.
• Sigue el método del plato: la mitad debe ser verduras, un cuarto proteínas y otro cuarto carbohidratos integrales.
• No te saltes comidas para mantener un nivel de energía constante.
• Opta por snacks saludables, como frutas, yogur natural o nueces, si tienes hambre entre comidas.

⋄ Mantén tu hidratación

• Bebe suficiente agua a lo largo del día. Limita las bebidas azucaradas y los refrescos. Prueba tés herbales o agua con frutas para variar los sabores.

⋄ Reduce los alimentos procesados

• Evita alimentos altos en azúcares, grasas no saludables y sodio, como papas fritas, dulces y comida rápida.
• Lee las etiquetas para identificar azúcares y aditivos ocultos.

⋄ Practica la moderación

• Disfruta ocasionalmente de alimentos menos saludables, pero en pequeñas cantidades.
• Concéntrate en hábitos sostenibles a largo plazo en lugar de dietas restrictivas.